El servicio de internet es una parte fundamental de la operación diaria de cualquier empresa, sin importar su tamaño, por lo que es necesario analizar con detenimiento las opciones disponibles y no sólo escoger por el precio.
Ubicación
Uno de los factores a considerar es la zona en la que te encuentres, pues puede ser posible que no puedas acceder a una conexión a través de fibra óptica por falta de infraestructura y debas optar por DSL o cable módem.
También es importante averiguar las experiencias que han tenido otros usuarios de la zona con su servicio de internet, pues una compañía puede tener un servicio estable en un área y en otra presentar fallas continuas.
Ancho de banda o velocidad
Ten en cuenta que el ancho de banda que te promete el proveedor es para todos los dispositivos conectados, por lo que entre mayor sea el número de usuarios requerirás un mayor ancho de banda.
Asimismo, debes considerar la clase de actividades que se realizarán en internet. Mientras un uso ligero que incluya correos electrónicos y navegación en internet requiere alrededor de 2 Mbps, si además planeas hacer uso de servicios de streaming o videoconferencias, deberás buscar un paquete con mayores prestaciones. En promedio, una empresa de 10 a 15 personas con un uso básico de internet necesita un paquete de 10 a 20 Mbps.
Si tus empleados deben estar conectados todo el tiempo y suben archivos pesados, como por ejemplo videos, podrías requerir de 20 a 60 Mbps. Si la pyme está muy involucrada en el comercio electrónico, podrías elevar tus requerimientos a alrededor de 100 Mbps.
Velocidad de subida y descarga
Por lo general, las compañías publicitan su velocidad de descarga, pero si tu actividad empresarial implica subir mucha información a internet o haces un uso intensivo de videoconferencias o programas en la nube, debes poner atención a la velocidad de carga o subida.
Los proveedores de internet generalmente te ofrecen un servicio asimétrico, es decir, que la velocidad de descarga es mayor que la de subida.
Términos y condiciones
A la hora de contratar cualquier servicio, es necesario que leas con detenimiento los términos y condiciones. En el caso de los paquetes de internet, las velocidades ofertadas por lo general dependen de que los equipos estén conectados de manera alámbrica al router, así que pregunta también cuántos equipos pueden estar conectados al router que te entreguen, o tal vez te puedas ajustar a trabajar a una menor velocidad pero de manera inalámbrica.
Pon atención a si existen cargos por la conexión inicial y al sistema que usan para otorgarte el router. La mayoría te lo entrega en comodato mientras tengas el servicio contratado, pero debes devolverlo al cancelar o pagar una multa.
Para obtener los precios más bajos ofertados, por lo general te solicitarán que domicilies el pago a una tarjeta. De no hacerlo, las mensualidades son más altas.
Telefonía
La mayoría de los paquetes empresariales te ofrecen internet y telefonía. Por lo general las llamadas locales son ilimitadas. Sin embargo, las llamadas internacionales o a celulares pueden tener ciertas restricciones.
En algunos casos, te ofrecen varias líneas, pero los minutos incluidos para llamadas solo aplican a la línea principal. No dejes de buscar la explicación en las «letras chiquitas».